Irán pone como objetivo a Estados Unidos y responderá “por todos los medios necesarios”

 Tras los bombardeos ejecutados por Estados Unidos contra tres de sus instalaciones nucleares clave —Fordow, Natanz e Isfahán—, el gobierno iraní ha condenado con firmeza la operación y ha advertido que los hechos tendrán “consecuencias eternas”. El ministro de Relaciones Exteriores, Abás Araqchi, calificó los ataques como una violación grave del derecho internacional y aseguró que Irán se reserva el derecho a responder “por todos los medios necesarios”.

“Los acontecimientos de esta mañana son escandalosos y tendrán consecuencias duraderas. Estados Unidos ha demostrado que no se detiene ante ninguna ilegalidad para servir a los intereses de un régimen ocupante y genocida como Israel”, expresó Araqchi en su cuenta de X (antes Twitter). El jefe de la diplomacia iraní también denunció que Washington, como miembro permanente del Consejo de Seguridad de la ONU, ha violado los principios de la Carta de las Naciones Unidas y el Tratado de No Proliferación Nuclear (TNP).

Desde Estambul, durante una reunión de la Organización de Cooperación Islámica (OCI), Araqchi insistió en que Irán “defenderá su soberanía, su seguridad y su pueblo” frente a lo que describió como una “escalada temeraria”. Según Teherán, los ataques estadounidenses no solo comprometen la estabilidad regional, sino que representan una amenaza directa a la seguridad global al golpear instalaciones que, según el régimen, eran de carácter pacífico.

El gobierno iraní no ha especificado aún cuál será su respuesta, pero los analistas coinciden en que Teherán podría recurrir a ataques contra intereses estadounidenses en Medio Oriente, activar a sus aliados en Siria, Irak o el Líbano, o incluso avanzar en la clausura del estrecho de Ormuz. Mientras tanto, el presidente Donald Trump ha advertido que si Irán toma represalias, “lo peor está por venir”, en una confrontación que podría empujar al mundo a una guerra de escala aún mayor.