Trump declara un "conflicto armado" contra cárteles mexicanos
La Casa Blanca califica las acciones contra organizaciones del narcotráfico como parte de una guerra
WASHINGTON D.C.- En un giro escalofriante para las relaciones México-Estados Unidos, el presidente Donald Trump ha comunicado oficialmente al Congreso que su administración considera que los enfrentamientos contra los cárteles de la droga constituyen un “conflicto armado”.
Según documentos internos revelados por The New York Times, la Casa Blanca sostiene que los presuntos miembros de estas organizaciones criminales deben ser tratados como “combatientes ilegales”, y que las operaciones militares que recientemente dejaron al menos 17 muertos en el Caribe, en septiembre, no son actos aislados, sino parte de una campaña de guerra.
Este posicionamiento marca una ruptura clara con la política tradicional de narcotráfico de Estados Unidos, y abre múltiples frentes de debate:
Soberanía mexicana vs. intervención extranjera: Al calificar como “conflicto armado” esta lucha contra los cárteles, EE. UU. podría justificar acciones militares o inteligencia con alcance transnacional, lo que México interpretaría como una forma de injerencia directa.
La declaración implica que Estados Unidos podría aplicar normativas de guerra a estos grupos, con consecuencias sobre normas de captura, derechos de detención, reportes de combate y protección civil.
Ante esta decisión, el gobierno mexicano podría responder con protestas diplomáticas o contrapropuestas políticas para preservar su autoridad sobre el uso de la fuerza en su territorio.
Aunque la administración Trump no ha detallado públicamente los alcances operativos previstos bajo esta nueva definición, el anuncio ya reconfigura el discurso estratégico entre ambos países y amplía el fuego cruzado político sobre quién ejerce la vigilancia y el combate al crimen transnacional.