Diputados aprueban subir cuotas migratorias y de turismo cultural para extranjeros
Entre las modificaciones más relevantes se encuentra el ajuste a los derechos que pagan los visitantes y residentes extranjeros
Ciudad de México.– Con una mayoría de 355 votos a favor y 132 en contra, la Cámara de Diputados avaló la nueva Ley Federal de Derechos, que forma parte del paquete económico 2026 y proyecta una recaudación superior a 157 mil millones de pesos.
La norma actualiza diversos cobros por servicios públicos, desde trámites migratorios y sanitarios hasta entradas a museos y zonas arqueológicas, en algunos casos con incrementos superiores al cien por ciento.
Entre las modificaciones más relevantes se encuentra el ajuste a los derechos que pagan los visitantes y residentes extranjeros.
El cobro para turistas sin permiso de trabajo pasará de 860 a 983 pesos, mientras que los permisos para residentes temporales subirán de manera considerable:
De un año: 5,328 a 11,740 pesos
Dos años: 7,984 a 16,693 pesos
Tres años: 10,112 a 21,142 pesos
Cuatro años: 11,984 a 25,907 pesos
En el caso de los residentes permanentes, la cuota se duplicará al pasar de 6,494 a 13,578 pesos. Además, se crea un nuevo derecho por autorización de visitas a embarcaciones en navegación de altura, con un costo de 297 pesos.
Museos y zonas arqueológicas, más caros
El artículo 288 de la ley establece que toda persona que acceda a museos, monumentos y sitios arqueológicos federales deberá cubrir una cuota actualizada.
Los ajustes quedan de la siguiente forma:
Categoría I (Palenque, Tulum, Teotihuacán, Monte Albán, Templo Mayor y Museo Nacional de Antropología): de 95.58 a 209.09 pesos.
Categoría II (Malinalco, Dzibanché, Comalcalco, La Quemada, Kabah, entre otros): de 78.71 a 156.75 pesos.
Categoría III (La Venta, Cuyuxquihui, Izapa, Museo Nacional de las Culturas del Mundo): de 73.09 a 143.69 pesos.
Categoría IV (Chichén Itzá, Uxmal, Dzibilchaltún y Museo del Pueblo Maya): nueva cuota de 104.50 pesos.
Desde la bancada de Morena, la diputada Claudia Rivera defendió la reforma al afirmar que el objetivo no es recaudar más, sino hacerlo con “justicia fiscal y transparencia”.
“Proponemos que quienes usan los servicios públicos paguen conforme a su costo, sin dejar a nadie atrás. Que quienes más tienen, contribuyan más”, subrayó.
Por el contrario, legisladores del PAN y PRI acusaron que las medidas representan una carga excesiva para la población.
La panista Noemí Luna reprochó que “se incrementen cobros migratorios, sanitarios y en telecomunicaciones, mientras el gobierno no invierte en seguridad fronteriza ni en servicios básicos”.
En tanto, la priista Ana Isabel González calificó la iniciativa como “una ley de impuestos disfrazada”, asegurando que “afecta directamente a los sectores más vulnerables”, mientras su bancada mostraba pancartas con las leyendas “No más deuda” y “No más impuestos”.