Sheinbaum rechaza intervención en Venezuela y llama a la ONU a actuar

Durante su conferencia matutina en Palacio Nacional, la mandataria abrió su mensaje con una advertencia clara tras las recientes declaraciones del presidente estadounidense Donald Trump, quien calificó al gobierno de Nicolás Maduro como una “organización terrorista extranjera”.

“Por la declaración del presidente Trump y la situación en Venezuela reiteramos la posición de México, acorde con la Constitución, de no intervención ni injerencia extranjera, autodeterminación de los pueblos y solución pacífica de las controversias”, expresó Sheinbaum.

La presidenta subrayó que esta postura no depende de la opinión que se tenga sobre el régimen venezolano, sino de un principio constitucional que, dijo, debe guiar a cualquier jefe de Estado mexicano.

“Es nuestra posición, por convicción y por Constitución. Debe ser la posición de cualquier presidente de México, más allá sobre las opiniones del régimen de Venezuela y la presidencia de Maduro”, afirmó.

Sheinbaum también dirigió un llamado directo a la Organización de las Naciones Unidas, a la que reprochó su falta de actuación frente al riesgo de una posible intervención militar.

“Y un llamado a Naciones Unidas a que asuma su papel, no se le ha visto. Que asuma su papel para evitar cualquier derramamiento de sangre y que se busque siempre la solución pacífica de los conflictos”, sostuvo.

En ese sentido, enfatizó que la comunidad internacional debe mantenerse vigilante para evitar una escalada bélica en Sudamérica.

“Esperemos que no se dé (una invasión). Hay que velar todos, el mundo entero debe velar porque no haya una intervención, que haya una solución pacífica a cualquier controversia”, señaló.

Cuestionada sobre la posibilidad de impulsar gestiones diplomáticas con gobiernos progresistas de la región, como Colombia o Brasil, Sheinbaum indicó que México podría explorar esa vía e incluso fungir como mediador, siempre que exista una solicitud expresa de ambas partes en conflicto.

Asimismo, expresó su confianza en que la situación no se agrave y aseguró que la Secretaría de Relaciones Exteriores mantiene un seguimiento cercano del tema. Informó que la embajada de México en Venezuela permanece atenta y en comunicación con la comunidad mexicana en ese país, por lo que exhortó a quienes residen o se encuentran de visita a mantenerse informados y en contacto con la representación diplomática.

Las declaraciones de la presidenta mexicana se producen después de que Donald Trump anunciara un bloqueo marítimo en el Atlántico para impedir el tránsito de buques petroleros venezolanos.

“Hoy ordeno un bloqueo total y completo de todos los petroleros sancionados que entren y salgan de Venezuela”, escribió el mandatario estadounidense en su red Truth Social.

Trump justificó la medida tras designar al gobierno venezolano como organización terrorista extranjera, argumentando presuntos actos de terrorismo, narcotráfico y trata de personas. Además, advirtió que la presencia militar de Estados Unidos en el Caribe “sólo seguirá creciendo” hasta que, afirmó, Venezuela devuelva activos que considera robados.

El gobierno venezolano respondió con un comunicado en el que rechazó la medida y calificó la amenaza como “grotesca”, al considerar que viola el derecho internacional y la libre navegación marítima.

“El presidente de los Estados Unidos pretende imponer un bloqueo militar ‘absolutamente irracional’ para intentar robar la riqueza de Venezuela”, señaló el texto oficial.

Por su parte, Nicolás Maduro acusó a Estados Unidos de intentar apropiarse de los recursos naturales del país sudamericano y aseguró que su gobierno defenderá la soberanía nacional.

“Tenemos un juramento absoluto de defender la patria y en Venezuela triunfe la paz”, declaró en un acto público.

El contexto de tensión se intensificó luego de que, el pasado 10 de diciembre, fuerzas estadounidenses incautaran un buque cisterna sancionado por el Departamento del Tesoro que había salido de Venezuela cargado de petróleo. La Casa Blanca afirmó que la embarcación formaba parte de una red ilícita vinculada a organizaciones terroristas.

Actualmente, la Oficina de Control de Activos Extranjeros de Estados Unidos mantiene sanciones contra más de 200 empresas, entre ellas la petrolera estatal venezolana PDVSA, así como compañías rusas relacionadas con el sector energético.