Irán lanza ofensiva masiva en Tel Aviv y Jerusalén tras bombardeos israelíes
Mientras Israel acusa a Irán de atacar zonas civiles, Teherán responsabiliza a Estados Unidos como cómplice de la agresión
El 13 de junio de 2025, Irán lanzó una oleada masiva de misiles y drones contra diversas ciudades israelíes, entre ellas Tel Aviv y Jerusalén, como represalia a los ataques previos del gobierno de Israel contra territorio iraní. La ofensiva, bautizada por Teherán como “True Promise III”, incluyó más de 150 misiles balísticos y fue la respuesta directa a la operación “Rising Lion”, en la que Israel bombardeó instalaciones nucleares y militares clave en la república islámica.
La defensa antimisiles de Israel logró interceptar la mayoría de los proyectiles, pero varios lograron impactar zonas urbanas, dejando al menos 34 heridos en territorio israelí, según reportes oficiales. Sin embargo, las cifras de víctimas son mucho más graves en Irán: el embajador iraní ante la ONU, Amir Iravani, declaró que los ataques israelíes dejaron al menos 78 muertos y más de 320 heridos, en su mayoría civiles. Además, acusó directamente a Estados Unidos de ser cómplice del ataque, señalando que las armas utilizadas fueron de origen estadounidense.
Desde el lado israelí, el ministro de Defensa, Israel Katz, acusó a Irán de haber "cruzado líneas rojas" al atacar zonas urbanas habitadas, comprometiendo la seguridad de la población civil. En un comunicado oficial, afirmó que su país continuará con medidas de defensa y que “el régimen de los ayatolás pagará un precio muy caro por sus acciones”.
La comunidad internacional expresó una profunda preocupación ante el riesgo de una escalada regional. Naciones Unidas convocó a una sesión de emergencia del Consejo de Seguridad, mientras gobiernos como el de Alemania, Francia y Turquía llamaron urgentemente a la desescalada. Estados Unidos, por su parte, admitió haber asistido a Israel en la defensa aérea, pero negó haber participado en los ataques ofensivos sobre Irán.
Con ambos países endureciendo su discurso y sin señales claras de contención, el conflicto amenaza con extenderse más allá del terreno militar. Mientras Irán promete que su ofensiva “apenas comienza”, Israel mantiene una movilización militar total. El escenario es tenso, y el mundo observa con preocupación el posible inicio de una nueva etapa de guerra abierta en Medio Oriente.