Defensa de García Luna denuncia trato extremo y solicita aplazamiento de apelación
Sus defensores, César de Castro y Valerie Gotlib, enviaron cartas a la Corte de Apelaciones del Segundo Circuito en Nueva York solicitando un aplazamiento para preparar una apelación contra la sentencia de 38 años
El exsecretario de Seguridad Pública de México, Genaro García Luna, lleva ocho meses recluido en prisiones de Estados Unidos bajo condiciones de aislamiento, según denuncian sus abogados. Durante este tiempo, el exfuncionario ha perdido más de 14 kilos, se le ha impedido bañarse, rasurarse y comer con cubiertos, además de no tener acceso a los documentos de su proceso.
Sus defensores, César de Castro y Valerie Gotlib, enviaron cartas a la Corte de Apelaciones del Segundo Circuito en Nueva York solicitando un aplazamiento para preparar una apelación contra la sentencia de 38 años de prisión que se le impuso por narcotráfico y pedían que se normalice la comunicación con su cliente. “Nunca antes habíamos estado imposibilitados de tener comunicación alguna con un cliente”, indicó Gotlib.
García Luna ha sido trasladado a lo largo de este año por tres prisiones diferentes, incluida la cárcel federal de Lee en Virginia y la prisión de máxima seguridad AMX Florence en Colorado, donde se encuentra actualmente. Los abogados detallan que, pese a no haber cometido infracciones, fue colocado en unidades especiales reservadas para presos “castigados”.
La defensa explica que las restricciones han dificultado incluso hablar por teléfono con García Luna. Entre las pocas llamadas permitidas, destacan una en enero y otra en julio, lo que ha complicado la preparación de los argumentos de su apelación. Por ello, solicitan un plazo adicional de 90 días para presentar su caso ante la Corte, con fecha tentativa hasta el 18 de diciembre.
Los abogados también señalaron que la fiscalía se ha visto obligada a intervenir para garantizar la comunicación con García Luna, pues previamente se le habían cancelado al menos dos llamadas sin explicación. La defensa asegura que esta situación ha generado un obstáculo significativo para preparar la apelación de un caso que consideran complejo, con más de dos mil páginas de transcripción judicial.